Segundo Volkswagen Passat

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En 1981, Volkswagen introdujo en el mercado el Passat de segunda generación (índice B2). Un sedán clásico de tres volúmenes ha aparecido en la familia de modelos, que lleva su propio nombre: Volkswagen Santana. En 1985, el automóvil se modernizó y en 1988 terminó la vida útil de su transportador, pero cómo: la circulación del Passat B2 ascendió a casi 5,5 millones de unidades, lo que lo convierte en el más masivo entre todos los Passat.

Según la clasificación europea, el "segundo" Volkswagen Passat pertenece a la clase de automóvil D, y su gama de carrocerías constaba de cinco soluciones: una berlina de dos o cuatro puertas, una camioneta, un hatchback de tres o cinco puertas.

Dependiendo de la versión de la carrocería, la longitud del automóvil varía de 4435 a 4545 mm, ancho - de 1685 a 1695 mm, altura - de 1385 a 1400 mm. Pero los indicadores de la distancia entre ejes y la distancia al suelo son los mismos para todas las modificaciones: 2550 mm y 145 mm, respectivamente.

Especificaciones. La línea eléctrica del Volkswagen Passat B2 se distingue por su diversidad.
Las unidades de gasolina con un volumen de 1.3 a 2.2 litros generan como máximo de 55 a 136 caballos de fuerza, y en contraste con ellos había dos diesel "fours" con un volumen de 1.6 litros cada uno, cuya potencia alcanza los 54 y 80 "caballos".
Algunos de ellos eran una transmisión manual de 4 o 5 velocidades o una "automática" de 4 velocidades.
Además de la tracción delantera, se ofreció tecnología de tracción total para el automóvil.

El Volkswagen Passat de segunda generación se basa en la arquitectura del Grupo Volkswagen B2, que asume la presencia de amortiguadores en la parte delantera y un resorte de suspensión semiindependiente en la parte trasera. El mecanismo de dirección no implica la presencia de un amplificador de control, los mecanismos de disco del sistema de frenos están montados en las ruedas delanteras y los "tambores" más simples están montados en las ruedas traseras.

Los aspectos positivos del Volkswagen Passat de segunda generación son un buen suministro de espacio interior, un gran maletero, motores económicos, fiabilidad estructural general, facilidad de mantenimiento, un precio asequible para las piezas básicas, buen agarre a la carretera y una suspensión cómoda.
Pero hubo algunos inconvenientes: dirección pesada, antigüedad venerable, materiales de acabado interior baratos, la ausencia de sistemas de seguridad.

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